es una nube,
nada más.
esto no es poesía,
esto es la vida.
la felicidad y la tristeza no son para escribir
se rien y se lloran,
se sufren y se disfrutan.
esto no es poesía,
esto es un intermedio entre el dolor y la risa
un recreo,
un impass (que fea palabra, impass.
¿ves? si estuviera escribiendo poesía no la usaría jamás..).
recuerdo el verano en que surqué las olas de tu mar.
recuerdo tus ojos verdes de mentiras por estallar.
ahora,
que ya estallaron bajo mi barquito,
espero sobrevivir al naufragio,
y compartir un tablón
y sobrevivirte.
y secar la tormenta de tus ojos
con las ojas muertas de este otoño tan psicótico
y hacerlas renacer, contra natura,
contra el destino,
o hasta contra dios, si es que se interpone en nuestro camino.
y volver a ver tus ojos verdes, secos y transparentes,
porque la tormenta no era tormenta
era una nube, y nada más.